Enfrentarse a las prácticas profesionales es aprender a adaptarse a un ambiente completamente distinto al académico. Para mí, este proceso ha sido más allá que una experiencia formativa; poner en práctica mis conocimientos teóricos le ha dado sentido a los años de carrera, ayudándome a reconocer y fortalecer mis capacidades en pro de un buen ejercicio profesional. En definitiva, ha ampliado mi perspectiva en la aplicación de mi disciplina en diferentes contextos, permitiéndome asumir mi rol como futura psicóloga.